19 d’abril 2009

Llamadas de regreso


"Perdóname por ir así buscándote tan torpemente..."
Pedro Salinas


Cerré la puerta sin quererlo, sólo porqué ya nunca entrabas. Cerré la puerta, pero te di la llave, como regalándote una invitación permanente a cruzarla. Me fui, no de verdad, sino en apariencia. Me fui, pero te di el silbato como mostrándote las ganas de oír algún día tu llamada de regreso.
Y todos preguntan si merece la pena esperar; como no esperarte si ese corazón tozudo y cabezota que se esconde entre costillas no deja de exigirlo y ahora por ahora, la razón dormida en mi cabeza, callada disimula.